miércoles, 11 de diciembre de 2013

DROGAS, DROGAS Y MÁS DROGAS.

Es algo que me crea un estado de ansiedad, nerviosismo y desesperación constante.
¿Que si yo me drogo? ¡Pues claro que lo hago! Pero no por ello me considero una adicta o eso signifique que no me drogue con cabeza.
Es un tema demasiado delicado y no tienen nada que ver un par de porros, si no con todos los derivados de la nieve.
Pero claro ya se vuelve mas serio si puedes perder a la persona que amas. En este caso YO.
¿Hasta que punto pierdes parte se tu ser? Con cada calada en una angustia menos pero una parte de ti que se anula, que se pierde.
Es un tema que me hace tener unas comeduras de cabeza horribles. Pero claro, quién eres tú para decir nada. Es mejor callar y aguantar. Quien quiere hacerlo lo hará y prefiero saberlo a que se haga a escondidas. Digamos que así soy más consciente de ello, del problema en sí. No hay nada de malo en divertirse pero no sé.. ¿no prefieres jugar a las cartas?
Estas mierdas químicas nuevas de ahora... cuánto daño están haciendo. Y ya no es eso, es que si tú mismo dices que no sabes controlar la cosa ya se complica.
Miles de pensamientos bloqueados en mi cabeza ahora mismo, solo suelto conceptos a la mitad y sin razonar medianamente bien. Algo es algo, pero no hay nada que me consuele y siempre tengo que estar en vilo esperando a qué pasará, qué hará, etc.
Me he replanteado muchas cosas en tan poco tiempo. Una de las pocas cosas de las que estoy segura en mi vida es que no quiero volver a pasar por esa tensión e incertidumbre que pasé en su día. Esos cinco terribles días, ni una llamada, ni un mensajito, un "estoy bien"... nada. Muy poca consideración por su parte pero en fin. ¿Qué le hago yo? Pues callarme y ver que pasa. Aguantarme, joderme, mirar hacia otro lado...

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