miércoles, 20 de noviembre de 2013

Algunas cosas que me quedan por decir...

En fin, ¿qué decirle yo ya?
Me siento tan afortunada tantas veces y otras veces tan desdichada. Es bonito tener a alguien que te quiera y a quien querer, claro que sí, pero no todo es de color rosa siempre. Aún así qué más da vale la pena ¿no?
A mí este tema siempre me ha dado tantos problemas, pero no me gusta vivir en el pasado y he de seguir adelante.
Antes que nada me gustaría pedirle disculpas, disculpas por mi negatividad, mi pesimismo, mis tonterías al fin y al cabo. Sé que no se merece aguantar ciertas cosas de mí pero qué se le va a hacer.
Es muy difícil encontrar a alguien así, una persona con la que encajes tan bien, con la que te sientas tan bien. La verdad, me siento algo espesa ya que nunca me he abierto con nada ni con nadie sobre que puedo llegar a sentir por este hombre. Es algo tan grande, tan inmenso... y tan guardado para mis adentros. Es difícil explicarlo y todo sería más fácil si cualquiera pudiese saber exactamente qué estás sintiendo en ese mismo instante. O al menos eso pienso yo.
Sé que soy pesada hasta la saciedad y muchas otras cosas, pero es tan importante para mí. Su llegada a mi vida ha supuesto tantas cosas, tantos cambios, no puede irse. Se caería todo, él y sus cosas son mis pilares ahora mismo. Es lo que me sujeta y me ayuda a que no me desmorone y no haga trizas yo sola. Porque sin el soy solamente un montón de restos de algo que un día fue alguien.

Ayer estuve escuchando música y entre tantas canciones encontré una con la que me identifico casi totalmente y me encantó. Pero me encantó para él. Y sé que algún día se la podré cantar y que él la entienda, me entienda. Pero hasta entonces solo puedo dejarla aquí y hacer como la que él lo ha leído.
Sé que él aún no sabe lo mucho que es para mí, si lo supiera... otro gallo cantaría.
Si supiera cuanto estaba pensando en él ayer cuando la estaba escuchando y él estaba a mi lado.

Es tremendamente increíble como me puedo llegar a sentir cuando él está ahí, simplemente ahí parado.
Hay muchas cosas que perturban mi mente con temas relacionados con él.
Su pasado, el mio. Son cosas que no tienen ningún sentido pero a la vez lo tienen por completo.
Es muy difícil porque quiero ser especial para él, como él lo es para mí. Quiero que me quiera tanto como yo le amo a él. Ser la única para él. Y es duro ser tan exigente conmigo misma para intentar ser perfecta para que no se vaya,  para que no busque en nadie más lo que yo no tenga. Le necesito tanto, si supiera cuanto le quiero... Si algún día yo llegara  a ser tan especial como lo fue alguien antes.
Muchas veces me pregunto si llegaré a ser tan importante para alguien. Si seré "el amor de mi vida" de alguien. Si alguien mataría por mí como yo lo haría.

En fin, basta ya de lamentos, esto no ha sido para nada todo lo que quería decir. Evidentemente quería decir cosas buenas, no esto.
Supongo que tengo que superar primero ciertas cosas y después.. no lo sé. No sé cuando voy a estar preparada para ser completamente feliz, pero eso sí, si alguien alguna vez me ha hecho minimamente feliz o sentirme bien fue él. Jamás en la vida me he sentido tan feliz como cuando él me hace sentirlo. Aunque no haga nada y este sentado en su cama mirando la pantalla del televisor, yo sola con tan solo estar a su lado, que haya decidido dedicarme su tiempo...
Creo que debería dejar este tema para otra ocasión.

lunes, 18 de noviembre de 2013

buenas noches desde tumblr

http://beyondthebluethoughts.tumblr.com/post/67415108906/despu-s-de-dos-encuentros-repentinos-me-voy-a-la

LO QUE NO DECIMOS NOS MATA.

¿Sabes a dónde van las palabras que no se han dicho?

¿A dónde va lo que quieres hacer y no haces?
¿A dónde va lo que quieres decir y no dices?
¿A dónde va lo que no te permites sentir?
Nos gustaría que lo que no decimos caiga en el olvido, pero lo que no decimos
se nos acumula en el cuerpo, nos llena el alma de gritos mudos.
Lo que no decimos se transforma en insomnio, en dolor de garganta.
Lo que no decimos se transforma en nostalgia, en destiempo.
Lo que no decimos se transforma en deber, en deuda, en asignatura pendiente.
Las palabras que no decimos se transforman en insatisfacción,
en tristeza, en frustración.

¿Hola de nuevo?

¿Quién lo diría, eh? Yo aquí de nuevo. 
Por pura casualidad he acabado en uno de mis antiguos blogs de 2012 o incluso de 2011 y me picó la curiosidad. Después de varios minutos leyendo me he dado cuenta de que mi vida ha cambiado tantísimo...
Mis estudios, mi familia, mis amigos, los amores... ¡ay los amores! Pero qué se le va a hacer.
Siempre me gustó mucho esto de escribir de vez en cuando y bueno qué mejor excusa que esto para empezar de nuevo.

Tengo ya 17 años, los cumplí hace poco. No acabé mis estudios a pesar de haber repetido el último año, sigo llevándome horriblemente mal con mi "familia", sigo teniendo problemas con las amistades y lo relacionado con el <<amor>> mejor lo dejamos ahí.

Leer mis publicaciones antiguas me ha hecho pensar bastante en lo mal que estuve, esa espiral de sentimientos negativos y pesimistas. Recuerdo todo aquel infierno. 
Las cosas tampoco han variado tanto en ese aspecto pero no son tan malas, la verdad. Sigo sintiéndome muy mal muchas veces pero soy una persona mucho más fuerte, con más autoestima, más madura, diferente (bastante diferente).

Aún está en trámite la separación de mis padres.
Mi hermana ya está en el instituto.
Se supone que estoy estudiando por libre para sacarme algo más que el Graduado Escolar.
Conocí a un chico estupendo (mi marmota) y de momento es la persona a la que más quiero en el mundo, o eso pienso ahora. Pero siendo realistas y dejando atrás las chiquillerías, tiene muchísimo más futuro que todo lo anterior.
He tenido nuevas e intensas mejores amistades que algunas acabaron muy mal, otras desaparecieron por arte de magia y otras, bueno, ahí van.
En cuanto a mis múltiples complejos, traumas o inseguridades: no me va tan mal, al acabar mi relación con T y digamos que al salir un poco más y relacionarme con otro tipo de gente mejoró consideradamente. Se acabaron los cortes en las muñecas y otras partes de mi cuerpo, el machacarme a mí misma cada día, el darme asco, el convivir con tu peor enemigo (tú mismo), el odiarme, etc. Fue algo que me costó mucho superar, y realmente lo sigo intentando cada día, simplemente un día me levanté y decidí que eso tenía que acabar y poco a poco me voy queriendo más y más a mí misma.
Me llevaron detenida al cuartel por hurto y he tenido varios encuentros con la fiscalia de menores y varios asistentes sociales.
Me he escapado de casa tantas veces que ya he perdido la cuenta. (Con la Guardia Civil buscándome, claro está)

Eso ha sido un brevísimo resumen de todo pero me quedan tantas cosas por contar...
Sigo sin rumbo, pero un poco más encarrilada que hace unos años y con otro tipo de mentalidad y principios morales.